Ciertamente, habría que ser mago
Susana T. Más Iglesias, La Habana 7 de
diciembre de 2012
Se
acercan las Navidades, Pascuas y Día de los Reyes Magos, algunos piensan en los
intercambios de regalo en centros laborales, otros en qué regalar a la persona que le hace los mandados;
aunque este último día, el de los Reyes, había perdido entusiasmo en la mayoría
de la población. Pero siempre existe alguien que hace el esfuerzo por tener
un gesto afectivo con el pequeño de la familia.
Todos
los que tienen niños no solo piensan en la mudita completa de ropa para
despedir el año, sino también en agregar algún juguete para que no pase
inadvertido. Y qué decir de los abuelos, los que aprovechan esta ocasión para
reafirmar su cariño desmedido con la entrega el 6 de enero de un sencillo un
sencillo juguete.
Todos
estos deseos se ven frustrados en gran medida, porque con los precios actuales
que han alcanzado, es como para alarmarse, morir de infarto o tristeza ante las
vidriera, al comprobar que los mejores, los que llenan de alegría los ojitos,
rebasan los $20.00 CUC.
Esto
se puede ver como una desmedida falta de respeto no tan solo hacia los adultos,
sino a los niños que al pasar por las tiendas donde se exhiben esos juguetes,
en su mente infantil unos abrigan la esperanza de poseerlos, otros que ya pasan los 4 años, saben que por las
condiciones sociales en que viven, es imposible siquiera tocarlos un momento.
Con
el triunfo de la revolución, el gobierno, basado en los pensamientos del Apóstol
José Martí, ha ratificado por más de
medio siglo ¨que nada hay más importante que un niño¨.
¿A
qué niños se refieren? Porque la educación y la salud no son solamente las
necesidades básicas a cubrir en ellos.
Los
juguetes forman parte esencial en su educación desde temprana edad, determinan
un papel importante en su aprendizaje, porque a través del juego se introducen
aptitudes y destrezas a desarrollar. ¿Cómo se cultiva la vocación de querer ser
médico, chofer, artista, cocinero o músico sino es a través del juego?
Por
los precios abusivos impuestos a estos artículos que se presentan en las
tiendas, muy pocos niños podrán obtener alguno.
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