Verdadero Honor a su Nombre.

Susana T. Más Iglesias, La Habana 9 de agosto de 2013.

Este es el auténtico momento en que los edificios veinte plantas que se construyeron  en Infanta y Calzada del Cerro, le hacen honor al nombre de esa famosa y conocida esquina: La de Tejas.

En escrito anterior se denunció la falta de atención por las entidades responsabilizadas con la reparación y mantenimiento de construcciones de esa magnitud fabricadas en la ciudad, y se explicó los riesgos  por los que actualmente y desde hace meses corren  vecinos y transeúntes de la localidad con la caída de parapetos y cubiertas laterales exteriores de concreto de esos altos inmuebles, que han estado privados de mantenimiento, a pesar de que sus apartamentos gozan de óptimas condiciones de confort y habitabilidad.

Pero al parecer la rápida acción de las entidades involucradas  ha sido solamente atiborrar de momento las entradas y alrededores de los colosos con tejas de zinc de diversos formatos, sin que se vea un interés inmediato de ejecutar con prontitud el inicio de su reparación, ya que se decidieron a ponerlas a principios del mes de julio y aún no se ejecuta nada más.

Estas tejas colocadas a modo de justificación, como  se muestra  en fotos adjuntas, poco podrán  amortiguar cuando se desprenda un parapeto, ya que su tamaño y peso, unidos a la velocidad según la altura al caer, ocasionará más daños que protección  al infortunado que pase por allí en ese momento. Serviría de ayuda tender redes que impidieran la caída libre de los escombros. También hay que tener en cuenta que por la calle Infanta, senda principal de comunicación con el resto de otros municipios, transitan ómnibus de transporte público, carros de alquiler y particulares, además de personas que se trasladan a pie.

Algunos vecinos piensan que este procedimiento llegó para quedarse de por vida,  o hasta que elementos inescrupulosos se decidan a sustraerlas y beneficiarse con su venta ilícita a necesitados. Otros se preguntan que de haber sucedido esto en el edificio de Infanta y Manglar donde sus habitantes son personalidades del deporte, cultura y  gobierno, qué solución se hubiese aplicado, y los más pesimistas tienen la seguridad de que así se quedarán ambos edificios, hasta que llegue el momento de su deterioro general. Los que tenían convenidas sus permutas y/o compra-ventas de apartamentos, han visto esfumarse sus ilusiones con esta situación.

Todos están atentos a  ver soluciones por parte de las instancias y  organizaciones de masas que solicitan constantemente la participación popular en las tareas revolucionarias de barrio como movilizaciones, trabajos voluntarios,  cotizaciones  y vigilancia.

¿Podrán los CDR, el núcleo zonal del PCC, la FMC y el gobierno municipal contribuir con los vecinos para que se efectúe a corto plazo esta tarea? Solo el tiempo será testigo. Ellos esperan que no se tomen medidas disparatadas.

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